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Educación en Finlandia: uno de los mejores modelos educativos del mundo
Educación en Finlandia: uno de los mejores modelos educativos del mundo
La educación en Finlandia, se ha convertido, a día de hoy, en uno de los mejores modelos educativos del mundo.
La educación en Finlandia y el informe PISA.
El sistema educativo finlandés tiene resultados muy positivos en los Informes Pisa. Este informe, es también conocido como “Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos”. Este estudio internacional lanzado por la OCDE en 1997 tiene como objetivo evaluar todos los sistemas educativos a nivel mundial cada tres años. Este estudio se basa en medir tres pilares de los sistemas educativos que son: enfoques de políticas; condiciones de enseñanza; indicadores de libertad y apertura social. Además, se evalúan las competencias de alumnos de 15 años en asignaturas como: lectura, matemáticas y ciencias.
En este estudio, participan 70 países y economías. Y de todas ellas, destaca Finlandia como país con mejor sistema educativo a nivel internacional desde el año 2000. En el último estudio que se publicó en diciembre de 2019, Finlandia ha demostrado que existe un perfecto equilibrio entre el éxito académico de los alumnos y la vida fuera de la escuela. Un dato, que no todos los sistemas educativos logran conseguir de forma sencilla.
Para entender de forma más cercana estos datos y conocer más de cerca la educación en Finlandia, vamos a profundizar en las características de su sistema educativo que lo hacen diferenciarse del resto y además, situarse entre los mejores del mundo.
Características destacables de la educación en Finlandia
A día de hoy se considera uno de los mejores del mundo y que más resultados positivos consigue.
Pero ¿en qué se diferencia la educación finlandesa de la educación que se lleva a cabo en otros países? En numerosas ocasiones, pensamos que la educación se imparte de igual forma: mismas metodologías, mismas características, mismos horarios, ect. Lo cierto, es que existen características esenciales de la educación en Finlandia, que nada tienen que ver con los sistemas de enseñanza que se llevan a cabo en otros países.
Estas características esenciales de las que hablamos en el párrafo anterior pueden parecernos simples, pero ayudan notablemente a conseguir un sistema educativo exitoso y destacable.
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Curiosidad y participación pasan a ser de gran importancia
Docentes, profesionales altamente valorados
En Finlandia, se considera a los docentes, como profesionales con gran autoridad en la escuela y en la sociedad. Además de estar altamente valorados, su profesión se considera una de las más prestigiosa. La titulación de magisterio, se considera exigente y a su vez complicada. Todos los profesores deben de realizar entrevistas personales, para valorar su preparación y vocación por la profesión.
Gratuita y accesible, educación al alcance de todos
La educación finlandesa es gratuita y 100% accesible a todos los alumnos, sin importar la renta ni su nivel de riqueza. La educación es obligatoria y gratuita de 7 a 16 años. Se imparte en centros públicos. Todo el material escolar y también los libros son totalmente gratuitos. Si los alumnos residen en una vivienda situada a más de 5 km del centro escolar en el que se encuentran estudiando, contarán con transporte gratuito que será costeado por el municipio en el que resida.
Además, en Finlandia, todos los alumnos disponen de una comida caliente al día gratis, lo que quiere decir que, las familias no tienen que preocuparse por pagar un comedor escolar en el caso de que se encuentren trabajando. Esto último, supone una ventaja para todas aquellas familias que no pueden costear un comedor escolar y que necesitan este tipo de servicios.
Educación personalizada
En otros artículos de nuestro blog, hemos hablado de la importancia que tiene la educación personalizada para los alumnos. En Finlandia, le dan mucha importancia y en todo momento apoyan a los alumnos con necesidades especiales, para evitar el aumento de dificultades con el paso de los cursos. Por esta razón, el fracaso escolar es mucho menor que en otros países.
En todo momento respetan el ritmo de aprendizaje que tiene cada alumno y las pruebas pasan a un segundo plano. Esto hace que se pueda valorar las capacidades de los alumnos de una forma mucho más amplia, sin necesidad de evaluar únicamente a través de pruebas orales o escritas que no reflejan otras cualidades de los alumnos como la creatividad.
Los profesores trabajan siempre con un mismo grupo. Esto ayuda a los profesionales a conocer las capacidades y necesidades de los alumnos a lo largo de su etapa educativa y de aprendizaje.
La competencia y las cifras apenas se utilizan
Hasta que los alumnos no están en el 5º curso, no se realiza ningún tipo de examen ni prueba numérica. Esto hace que los alumnos y familiares, no se centren tanto en los resultados numéricos y presten más importancia a la evaluación del alumno de forma global. Por esa razón, todos los informes que se elaboran del alumno son descriptivos.
Curiosidad y participación pasan a ser de gran importancia
La imaginación, la creatividad, la experimentación y la colaboración de los alumnos cobra mucha más importancia que la memorización o las lecciones teóricas. El foco se centra en la imaginación y la capacidad que tienen los alumnos de emprender. Por esta razón, existen asignaturas orientadas a la creatividad, el arte, la tecnología o la ingeniería. La clave radica en aprender asignaturas esenciales, pero también en descubrir la verdadera vocación de cada alumno.
Toda la sociedad considera que la educación es un pilar fundamental
Toda la sociedad (padres, alumnos, familias y también personal docente) considera que la educación es fundamental para el desarrollo de los más pequeños. Por esta razón, siempre se complementa con actividades culturales que fomenten la enseñanza del alumno. Los padres tienen facilidades a la hora de conciliar su vida laboral y familiar, logrando así, pasar más tiempo con sus hijos y dedicar el tiempo necesario a que éstos se sigan formando fuera de los centros escolares.
Alumnos con tiempo para todo
Esta es una característica que puede considerarse diferente si se compara con otros modelos educativos. Los alumnos no tienen que hacer deberes en casa, todo se realiza en clase. Esto hace que tengan más tiempo libre para descansar y fomentar su creatividad, aprovechando las clases escolares al 100%.
En Finlandia, los niños no comienzan su etapa escolar hasta que no tienen 7 años, momento en el que se considera que los alumnos tienen suficiente madurez para aprender y desarrollar sus capacidades intelectuales. Además, las jornadas lectivas son mucho más cortas, con una media de cuatro clases al día y con descansos de 15 minutos entre cada clase.
Preparar las clases forma parte de la jornada laboral de los docentes
Los profesores no dedican toda su jornada laboral a impartir clases. Destinan un tiempo de ella a preparar lecciones, investigar temas de interés para los alumnos, organizar sus clases y lecciones y trabajar de forma colaborativa con otros profesores. Esto hace que la educación se enriquezca aún más y se mezclen diferentes pensamientos y puntos de vista que pueden ayudar a crecer personal y profesionalmente al alumno.